Un poco de nutrición

     A pesar de que me encantan las cosas dulces tengo que admitir que no son las cosas más sanas. Cuando comenzó mi pasión por la cocina no hacía recetas dulces. Es más, la primer receta que aprendí fue la receta de la pizza casera de mi abuela. Me quedaba tan rica como a ella y eso que tenía apenas 10 años. Luego se me olvidó y hasta ahora no logro que me queden tan ricas :( 
Pero bueno al menos la tengo a ella para que me las prepare :) 
Mi primera receta dulce también me la enseñó ella, es una torta de origen brasileño y fue mi único plato dulce por unos cuantos años. Hasta que no pude evitar enamorarme de los Cupcakes y las Cookies decoradas ( ¿quién puede? ). Ahora lo que más me gusta cocinar son cosas dulces, te llenan el alma. ¿Quién no sonríe de ver una simpática galletita? ¿O un elegantísimo cupcake?
Y bueno, es que las cosas dulces son nuestra gran compañía, cuando invitamos una amiga a pasar un rato y conversar de nuestras emociones ¿no hacemos algo dulce? Lo dulce nos reconforta.
          Pero bueno hay que cuidar la salud y comer verduras, frutas y cereales en abundancia.
La verdad es que las primeras dos cosas las como fácil pero los cereales me cuesta un poco. Pero hago el intento...
Por eso es que he pensado en tratar de aprender un poco de nutrición y tratar de encontrar la una manera fácil de comer esas cosas que me cuesta un poco comer pero que sé que tengo que comer.
Por ejemplo la Acelga.
Confieso que la señora acelga y yo estamos un poco enemistadas, nunca me pude acostumbrar a comerla. 
Mi madre me hacía comerla de niña y yo la odiaba. Me hacía dibujos en los platos con las verduras (sólo cuando en el plato había acelgas ¬¬ ) y a mi me gustaban los dibujos, claro pero las acelgas no.
Pero por suerte hace un tiempo me contaron un secreto sobre estas preciosas hojitas: Si les pones una cucharadita de azúcar cuando las estás cocinando luego no son amargas!!! Y la verdad que me ha funcionado.
Es más, hace unos días me preparé esto y quedó muy rico :)



Sí, tiene panceta, un poquito, pero si quieren lo pueden sustituír por otra carne, ó huevo ó queso, ustedes deciden.

Ingredientes:
Acelga 1 atado
Panceta 50g 
Ajo 2 dientes
Sal y pimienta a gusto
Azúcar 1 ó 2 cucharaditas

Lavar bien las acelgas y cortarlas. Es importante utilizar una parte de los tallos al menos porque es bueno comerlos.
En una sartén colocar la panceta en trocitos pequeños y saltearla, no es necesario agregar aceite porque se van a saltear con la grasa de la panceta. Agregar el ajo cortado chiquito y la acelga. Agregar la sal, y el azúcar. 
Cocinar hasta que los tallos de la acelga estén tiernos. Agregar la pimienta a gusto y probar la preparación a ver si le falta algo. Si aún está amarga pueden agregar un poquito más de azúcar.
Está listo!!! Ya pueden comer este plato light :) Y también pueden comer un cupcake de postre, no hay problema, no hay problema porque comieron verduras :)

Recuerden que " La acelga reúne un amplio abanico de vitaminas, es rica en fibra y cuenta con minerales como calcio o hierro que no son abundantes en otras verduras, o potasio, necesario para transmitir los impulsos nerviosos y en la actividad muscular. Su contenido en agua es muy alto, lo que la convierte en un alimento muy diurético, con un aporte energético bajo, por lo que es aconsejado en dietas de adelgazamiento y en personas con hipertensión. Por su hierro es muy útil en caso de anemia y estreñimiento. Además, resulta calmante en los problemas digestivos e intestinales. Destacan
en ella la vitamina C y el betacaroteno o provitamina A, de ahí su carácter protector ante el cáncer, pues sus sustancias actúan como antioxidantes del organismo. La vitamina A es importante para la vista, piel, pelo, huesos y sistema inmunológico. La acelga está recomendada para embarazadas por su riqueza en ácido fólico, que ayuda a prevenir la anencefalia y la espina bífida."


Saludos V. Cake.

Fuente: Colección I love verduras, diario El País.



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